Para la Escritora y Terapeuta Familiar Laura Gutman, con quien comparto su mirada y la manera que traduce la realidad emocional, nos dice que... todo pedido que el individuo, ( sea niño, adolescente o adulto ) manifiesta, de cualquier tipo, es inmenso si el otro con quien comparte dicho pedido no tolera un deseo diferente del propio. O bien no tolera la integración y la convivencia de dos deseos.
Les cuento que estamos hablando de violencia emocional. Aunque el término les parezca exagerado y creamos que la violencia solo se ve en la televisión o se lee en las noticias policiales de los diarios, la violencia, como fenómeno individual y colectivo, es sencillamente esto: la imposibilidad de que convivan dos deseos en un mismo campo emocional.
Por eso, para comprender las dinámicas violentas, es útil observar si en el campo de intercambio emocional, pueden convivir dos deseos. Es decir, si mi deseo se introduce en un ámbito emocional y, para que eso ocurra, obligatoriamente, tengo que expulsar el deseo del otro...estamos ante un claro ejemplo de circuito de violencia. Inversamente, si el deseo del otro quiere introducirse y, en ese caso, mi propio deseo tiene que ceder espacio, también hay violencia.
Es importante que tengamos en cuenta este concepto, ya que nos permitirá comprender dinámicas de violencia emocional o invisible que, de otro modo, son muy difíciles de detectar.
Usemos esta mirada sobre la violencia para reflexionar....y luego resignifiquemos dando lugar al debate.
